domingo, 3 de mayo de 2015

Un paseo por el Salón Vinoro 2015

Ni siquiera las obras de restauración que se están haciendo en la fachada del Hotel Ritz le hacen perder parte de su señorial presencia en uno de los rincones más bellos de Madrid. Los 105 años de historia imponen desde que llegas a la Plaza de la Lealtad, hasta que entras por su puerta giratoria. Cada paso que das para adentrarte en él, te hace sentir parte de la historia de Madrid. Cuando entras en su espectacular hall una enorme alfombra te da la bienvenida. El vértigo asoma mientras caminas por ella, cuando te paras a pensar que esos mismos pasos los han dado antes grandes personajes durante el último siglo.



No hay mejor antesala para comenzar un evento en el que se pueden degustar una buena muestra de los vinos más premiados.  Hace unos días me pasé por el Salón Vinoro 2015, en el que grandes bodegas como Torres, que cumple su 145 aniversario, o  Marqués de Arviza, se dan la mano con otras bodegas más familiares, y quizá, menos conocidas. Pero todas ellas tienen un punto en común: la pasión que vuelcan en el cuidado de sus viñedos y en la elaboración de sus caldos.